Halloween en Oviedo

Halloween y Samaín en Oviedo

En Oviedo, Halloween se celebra con espíritu astur y raíces celtas, fusionando la tradición del Samaín con actividades culturales y familiares que llenan el casco histórico de luces, disfraces y leyendas.

Entre los actos más esperados destaca la visita teatralizada gratuita “Sombras y luces en Oviedo”, un recorrido vespertino por el Oviedo antiguo con historias de mitología asturiana, leyendas locales y tradiciones vinculadas al 31 de octubre y 1 de noviembre.

La actividad, organizada por los proyectos Taller de Empleo Oviedo Disfruta Cultura y Escuela Taller Teatro de Pumarín, se enmarca en las acciones municipales de dinamización cultural y turística. Está pensada especialmente para familias con niños y niñas de 6 a 12 años y sus acompañantes.

Con salida desde la Plaza de la Catedral (junto a la estatua de Alfonso II el Casto), la ruta realiza un recorrido de unos 60 minutos con paradas en puntos emblemáticos como el Tránsito de Santa Bárbara, la Corrada del Obispo, San Vicente o la Plaza Porlier. Se celebrará los días viernes 31 de octubre y lunes 3 de noviembre de 2025 a las 18:00 horas.

Actividad gratuita · Organiza Ayuntamiento de Oviedo — Área de Empleo.

Samaín: raíces y tradición

Samaín y calabazas en Oviedo

El Samaín (del gaélico Samhuinn, “fin del verano”) es una antigua celebración celta que marcaba el cierre del ciclo agrícola y el comienzo del invierno. En esa noche, según la creencia popular, se abría un puente entre el mundo de los vivos y el de los espíritus, por lo que se encendían hogueras y luces para guiar a los antepasados y ahuyentar a los malos espíritus.

En Asturias, al igual que en Galicia, Irlanda o Escocia, el Samaín pervive en costumbres rurales y festivas que hoy inspiran la forma local de celebrar Halloween. Las calles se iluminan con calabazas vaciadas y talladas, una tradición ancestral vinculada a las antiguas “nabizas” o cabezas de nabo con velas que simbolizaban el alma de los difuntos y se colocaban en caminos y ventanas para proteger los hogares.

También el popular “truco o trato” tiene origen en esta herencia celta: los niños recorrían las aldeas pidiendo ofrendas o dulces a cambio de rezos por los muertos o para evitar travesuras de espíritus. Con el paso de los siglos, la costumbre viajó a otros países y regresó transformada, pero su esencia —la relación entre lo festivo y lo espiritual— sigue viva en el Samaín ovetense.

Hoy, Oviedo recupera esa memoria con actividades familiares, talleres y rutas mitológicas que reinterpretan las leyendas locales y la mitología asturiana: xanas, trasgus, guirnaldas de luz y cuentos que recuerdan que, antes del Halloween moderno, el norte celta ya celebraba la noche más mágica del año.